Tras haberse conocido hoy la noticia de que varias de las personas que lideraron el Movimiento de los Paraguas de 2014 en Hong Kong (en favor de la democracia) habían sido informadas por la policía de que se van a presentar cargos en su contra, Amnistía Internacional ha reaccionado afirmando que la libertad de expresión y reunión pacífica se encuentra sometida a constantes ataques en esa región.
La decisión se ha hecho pública un día después de que Carrie Lam fuera elegida primera ministra de la región por un comité de 1.200 integrantes, en su mayoría cargos políticos designados por Pekín. En concreto, según la policía se presentarán cargos por delitos contra el orden público contra las siguientes personas: los líderes estudiantiles Tommy Cheung y Chung Yiu-wa, la diputada Tanya Chan, el diputado Shiu Ka-chun, y los profesores universitarios Benny Tai y Chan Kin-man, que junto con el reverendo Chu Yiu-ming —también acusado— dieron comienzo a la campaña de desobediencia civil “Occupy Central”.
Ante estos hechos, Mabel Au, directora de Amnistía Internacional Hong Kong, ha declarado:
“Los constantes ataques contra destacadas figuras del ‘Movimiento de los Paraguas’ son un duro golpe para los derechos a la libertad de expresión y de reunión pacífica en Hong Kong. Esta actitud revanchista deja traslucir desprecio hacia libertades muy consolidadas en Hong Kong y sólo puede dar lugar a nuevas tensiones políticas.
Las autoridades han tenido años para estudiar estos casos. El momento en que se han dado a conocer los cargos, justo un día después de que Carrie Lam ganara las elecciones como primera ministra, hace temer que la decisión de presentarlos ahora responda a maniobras políticas”.