La profesora universitaria ugandesa que criticó al presidente y a su esposa en Facebook debe ser liberada de inmediato y sin condiciones; así lo ha afirmado hoy Amnistía Internacional al saber que ha sido formalmente acusada de insultar al presidente y violar su derecho a la intimidad en aplicación de la Ley sobre uso indebido de la informática, de 2011. Su procesamiento vulnera las obligaciones de Uganda relativas al derecho a la libertad de expresión en virtud de la Constitución del país, así como el derecho regional e internacional de los derechos humanos.
La doctora Stella Nyanzi, madre soltera de tres hijos, ha criticado repetidamente al presidente, Yoweri Museveni, y a la primera dama, Janet Museveni, quien además es la ministra de Educación y Deporte, por incumplir su compromiso de proporcionar compresas higiénicas a todas las niñas escolarizadas. La profesora feminista fue detenida el 7 de abril. Hoy se ha declarado inocente ante el tribunal y ha sido enviada a prisión preventiva hasta el 25 de abril.
“La falta de compresas higiénicas es una de las razones principales del abandono escolar de las niñas en Uganda. La doctora Nyanzi lidera una campaña destinada a garantizar que las niñas pueden seguir asistiendo a clase en condiciones dignas mientras tienen el periodo; las autoridades, en lugar de aplaudirla, la han sometido a acoso e intimidación y ahora la han detenido”, ha afirmado Muthoni Wanyeki, directora regional de Amnistía Internacional para África Oriental, el Cuerno de África y los Grandes Lagos.
“Detener a Nyanzi simplemente por criticar al presidente y a su esposa no sirve a ningún fin legítimo. El Estado debe dejar de malgastar recursos en procesamientos sin sentido y basados en motivos políticos, retirar de inmediato todos los cargos contra ella y ponerla en libertad incondicional.”
“Además, las autoridades deben revocar de inmediato la Ley sobre uso indebido de la informática y respetar, proteger, promover y realizar el derecho a la libertad de expresión de todos los ugandeses.”
Los cargos se basan en declaraciones de Nyanzi publicadas en medios sociales, incluida una en la que se refería al presidente Museveni como “un par de nalgas”, entre otras cosas.
Las personas que ocupan cargos públicos deben tolerar más críticas que los individuos particulares. Las leyes que tienen la intención o el efecto de prohibir los insultos al jefe del Estado o a cargos públicos son desproporcionadas e innecesarias y ejercen un efecto paralizante sobre la libertad de expresión.
Información complementaria
La doctora Nyanzi ha sido detenida menos de dos meses después de empezar a criticar a la señora Museveni, como ministra de Educación, por el hecho de que el gobierno no proporcione compresas higiénicas a todas las niñas escolarizadas. Era una promesa electoral que había hecho su esposo dos años antes durante su campaña para extender su régimen, de 30 años de duración. La señora Museveni dijo al Parlamento el 14 de febrero que el gobierno no tenía dinero para comprar compresas higiénicas.
La doctora Nyanzi también organizó una campaña pública de recaudación de fondos destinados a adquirir compresas higiénicas para las niñas escolarizadas; con ella ha logrado recaudar miles de dólares y difundir ampliamente el asunto entre los ugandeses dentro y fuera del país.
El 6 de marzo, la policía interrogó a Nyanzi sobre sus críticas al presidente Yoweri Museveni y a la primera dama, y una semana más tarde impidió que tomara un avión con destino a los Países Bajos para asistir a una conferencia académica. El 30 de marzo, en una rara aparición suya en una entrevista por televisión, la primera dama afirmó que la había perdonado; sin embargo, Nyanzi fue detenida a los pocos días.
Mientras, el 8 de abril, una destacada periodista fue secuestrada e interrogada durante varias horas por personas no identificadas poco después de haber recibido amenazas por sus comentarios de apoyo a la doctora Nyanzi publicados en redes sociales. Gertrude Tumusiime Uwitware aseguró que la habían secuestrado y conducido con los ojos vendados hasta un lugar secreto, donde la habían interrogado durante horas. La policía ha condenado su secuestro y afirma que está investigando.