La visita del Papa a Lesbos debe sacar a la luz los abusos cometidos al amparo del acuerdo entre la UE y Turquía

La visita el sábado del Papa Francisco y líderes de la iglesia cristiana ortodoxa a la isla griega de Lesbos brinda una oportunidad de oro para sacar a la luz la inquietante situación de las miles de personas refugiadas y migrantes detenidas arbitrariamente allí desde que el fatídico acuerdo entre la UE y Turquía entró en vigor el 20 de marzo. Así lo ha manifestado Amnistía Internacional.
“Durante su visita, el Papa Francisco arrojará luz sobre la crucial labor de la solidaridad local e internacional para ayudar a algunas de las personas más vulnerables en plena crisis de refugiados. Pero también debe hablar sobre los abusos, el miedo y la incertidumbre que sufren miles de personas refugiadas y migrantes atrapadas en el limbo en Lesbos y otros lugares de Grecia”, ha manifestado Gauri van Gulik, directora adjunta de Amnistía Internacional para Europa.
“En el campo de detención de Moria, en Lesbos, hemos visto con nuestros propios ojos el demoledor impacto que el acuerdo entre la UE y Turquía tiene sobre los hombres, mujeres, niños y niñas, incluida una gran cantidad de personas refugiadas vulnerables, que permanecen en reclusión arbitraria. El Papa debe dejar claro que, si no cambia de rumbo, la vergüenza caerá sobre Europa.”
Un equipo de investigación de Amnistía Internacional accedió el 5 y 6 de abril a los centros de detención, altamente restringidos, de Moria, en Lesbos, y de VIAL, en Chios.
Allí presenció cómo miles de personas refugiadas y migrantes permanecían recluidas arbitrariamente en condiciones atroces y con un miedo, una incertidumbre y una desesperación cada vez mayores respecto a cuál será su suerte a raíz del acuerdo entre la UE y Turquía. Muchas de ellas no tenían claro cuál era su situación respecto al asilo y temían ser devueltas a Turquía.
La organización ha documentado también abusos contra personas refugiadas y migrantes en Turquía desde que se alcanzó el acuerdo: por ejemplo, devoluciones forzadas de personas refugiadas a Afganistán y Siria.