Resolución de la ONU sobre Yemen no prevé apertura de investigación internacional sobre crímenes de guerra

Hoy es un día para la decepción, pues el Consejo de Derechos Humanos de la ONU no ha ordenado la apertura de una investigación internacional sobre las violaciones del derecho internacional humanitario y los abusos y violaciones del derecho internacional de los derechos humanos cometidos en el conflicto que asola Yemen, ha afirmado Amnistía Internacional.
El Consejo ha adoptado hoy una resolución –presentada por Arabia Saudí en nombre de los Estados árabes que participan en el conflicto y del gobierno yemení de Abd Rabu Mansur Hadi– que no prevé la creación de un mecanismo internacional para investigar tales violaciones y abusos cometidos por las partes implicadas en el conflicto.
“Esta resolución refleja el vergonzoso fracaso del Consejo de Derechos Humanos a la hora de cumplir su obligación de garantizar justicia y rendición de cuentas, y transmite el mensaje de que la comunidad internacional no tiene realmente la intención de acabar con el sufrimiento de la población civil en Yemen”, manifestó James Lynch, director adjunto del Programa Regional de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África.
“El documento fue redactado por Arabia Saudí, líder de la coalición militar que precisamente ha cometido violaciones graves del derecho internacional en Yemen, con indicios que apuntan a crímenes de guerra.”
La resolución no menciona a la coalición liderada por Arabia Saudí ni hace referencia expresa a la actual campaña militar de la coalición en Yemen. Solicita a la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos que preste asistencia a una comisión nacional de investigación establecida por el gobierno yemení reconocido por la comunidad internacional, que está respaldado por Arabia Saudí.
“Hasta ahora, el gobierno de Yemen no ha emprendido investigaciones creíbles sobre las denuncias de atrocidades cometidas por todas las partes en el conflicto. Además, el gobierno no tiene el control efectivo de gran parte del país”, declaró James Lynch.
“Creemos que la única forma de conocer la verdad es mediante una investigación internacional independiente y eficaz.”
El gobierno de Países Bajos había estado intentando que se adoptase una resolución en la que se pidiese a la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos que realizase una investigación internacional independiente, pero retiró su proyecto de resolución el 30 de septiembre al no conseguir suficiente apoyo internacional.
Las autoridades yemeníes no han emprendido investigaciones exhaustivas e independientes de violaciones de derechos humanos cometidas en el pasado, por ejemplo, de los abusos perpetrados en el contexto de las protestas antigubernamentales de 2011.
“Lamentablemente, la inacción de las autoridades yemeníes en el pasado no augura nada bueno sobre su capacidad de hacer rendir cuentas a los responsables, proporcionar reparación adecuada a las víctimas y a sus familias y velar por que las fuerzas de seguridad cumplan las normas internacionales de derechos humanos”, dijo James Lynch.
“Desde que estalló el conflicto, ha imperado un clima de impunidad, en el que no se ha puesto freno a las violaciones del derecho internacional humanitario ni a los los graves abusos y violaciones de derechos humanos. Es crucial sustituir la impunidad por la rendición de cuentas para evitar que proliferen y se afiancen este tipo de crímenes.”
Han muerto en el conflicto más de 2.300 civiles, entre ellos al menos 400 niños y niñas. Amnistía Internacional tiene constancia de que todas las partes en el conflicto han cometido abusos que pueden constituir crímenes de guerra, entre ellas el grupo armado de los huzis y los grupos armados contrarios a los huzis, pero la gran mayoría de las víctimas civiles han sido ocasionadas por la coalición que lidera Arabia Saudí, que también recibe el respaldo de Estados Unidos y Reino Unido.
Las fuerzas de la coalición también han usado municiones de racimo prohibidas, que tienen por naturaleza un efecto indiscriminado y que, según se ha descubierto, han sido fabricadas o diseñadas en Estados Unidos. En todo Yemen se agudiza una gravísima crisis humanitaria y casi un millón y medio de personas se han visto desplazadas de sus hogares.