Hong Kong: Tras una sentencia histórica, el gobierno debe mostrar progresos sobre la legislación relativa a las uniones de personas del mismo sexo

  • El gobierno dispone de un año para implantar un marco legal alternativo para las parejas del mismo sexo
  • En la actualidad, en Hong Kong, a las parejas del mismo sexo se les niegan numerosos derechos de los que disfrutan las parejas heterosexuales

Un año después de una sentencia histórica sobre los derechos de las personas LGBTI en Hong Kong, las autoridades deben proporcionar una actualización de los progresos de sus planes para reconocer las uniones de las parejas del mismo sexo en la ciudad. Así lo ha manifestado hoy Amnistía Internacional.

El 5 de septiembre de 2023, el Tribunal de Última Instancia de Hong Kong resolvió que el gobierno tenía el deber constitucional de proporcionar un marco legal alternativo para reconocer las uniones de parejas del mismo sexo, y fijó un plazo límite de dos años para su establecimiento.

Aunque la decisión no exigía el matrimonio igualitario, sí establecía un nuevo parámetro de referencia para mejorar los derechos y el reconocimiento independientemente de la orientación sexual.

“Un año después de esta memorable victoria jurídica para las personas LGBTI en Hong Kong, instamos al gobierno a proporcionar una actualización de sus planes para actuar respecto a la sentencia del tribunal. El gobierno tiene un año para cumplir con la decisión pero, mientras tanto, se está negando la igualdad a diario”, ha declarado Sarah Brooks, directora de Amnistía Internacional China.

“El gobierno debe atender la petición de sus propios tribunales respecto a garantizar que las relaciones entre personas del mismo sexo en Hong Kong sean reconocidas en condiciones de igualdad —y sobre la misma base y con los mismos derechos— que las de las personas de distinto sexo.”

La legislación de Hong Kong no reconoce en la actualidad las relaciones entre personas del mismo sexo, y a las parejas homosexuales no se les permite contraer matrimonio ni establecer ningún otro tipo de unión civil registrada legalmente.

Por tanto, a las parejas del mismo sexo se les impide disfrutar de los derechos de los que gozan las parejas de distinto sexo (con algunas excepciones si contraen matrimonio en el extranjero*). Pueden encontrarse ejemplos prácticamente en todos los aspectos de la vida.

En la actualidad, las personas que mantienen relaciones con otras del mismo sexo:

  1. No pueden adoptar niños o niñas conjuntamente con su pareja
  2. No pueden acceder a tecnologías de reproducción asistida
  3. No pueden heredar los bienes de su pareja fallecida a menos que ésta se los legue en su testamento*
  4. No pueden solicitar una vivienda pública como “familia ordinaria”*
  5. No pueden disfrutar de los beneficios potenciales de realizar una tributación conjunta*
  6. No pueden incluir a su pareja del mismo sexo en su seguro médico si están empleadas por el gobierno*
  7. No pueden oponerse a la extirpación de los órganos de su pareja fallecida para investigación médica o educación
  8. No reciben notificación inmediata si su pareja muere en prisión
  9. No gozan de protección contra un trato desfavorable de su empleador o empleadora si tienen que cuidar de su pareja con una enfermedad terminal

“La ausencia de un marco jurídico para uniones de personas del mismo sexo en Hong Kong significa que estas parejas sufren una discriminación estructural. Es hora de que el gobierno de Hong Kong proporcione una actualización transparente sobre los progresos relativos a este marco, que incluya cuánto de ese marco se ha redactado, cómo se está consultando a las personas LGBTI y cuándo se presentará el marco al Consejo Legislativo de la ciudad para su debate”, ha manifestado Sarah Brooks.

“El tiempo apremia. Este primer aniversario debe servir de impulso para acelerar el trabajo del gobierno destinado a cumplir la sentencia del Tribunal, para revisar y reformar las leyes, políticas y prácticas que discriminan a las personas por su orientación sexual, identidad de género o condición intersexual, y para cumplir con su obligación de conceder derechos a todas las personas, independientemente de cómo se identifiquen o de a quién amen”.

Información complementaria

El 5 de septiembre de 2023, el Tribunal de Última Instancia de Hong Kong dio una victoria parcial al activista de los derechos de lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI) Jimmy Sham. El tribunal fijó un plazo de dos años para que el gobierno proporcionara un marco alternativo para las uniones de personas del mismo sexo, lo que significa que el proceso debe completarse antes del 5 de septiembre de 2025.

Sham, que se casó en Estados Unidos en 2013, comenzó su campaña para que Hong Kong reconociera los matrimonios entre personas del mismo sexo celebrados en el extranjero en 2018, con el argumento de que la legislación actualmente vigente es inconstitucional.

En la actualidad, Hong Kong sólo reconoce jurídicamente el “matrimonio” entre hombre y mujer y no reconoce el matrimonio homosexual, las uniones civiles ni ninguna otra forma de unión legal.

Las autoridades no han adoptado medidas suficientes para combatir la discriminación de las personas LGBTI en general, a pesar de la clara recomendación del Comité de Derechos Humanos de la ONU, encargado de vigilar el cumplimiento por parte del gobierno de sus obligaciones en virtud del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP), formulada tras su examen de Hong Kong en 2022.

No obstante, el Tribunal de Última Instancia y tribunales inferiores de Hong Kong han sostenido en años recientes que la negación general de los derechos de unión para las parejas del mismo sexo es discriminatoria, y con ello han abierto la puerta a algunos progresos limitados como, por ejemplo, aceptar el derecho de las parejas del mismo sexo a visados conyugales, prestaciones laborales, tributación conjunta y vivienda pública.

Amnistía Internacional se opone a la discriminación en las leyes de matrimonio civil por motivos de orientación sexual o identidad de género, y pide a los Estados que reconozcan a las familias de elección, traspasando fronteras si es necesario.