Para celebrar el 60º aniversario de Amnistía Internacional, se ha estrenado hoy una impresionante película con dramáticos despliegues artísticos con drones que demuestran a activistas de la organización en cinco lugares emblemáticos del mundo, entre ellos el Zócalo de la Ciudad de México.
Una versión orquestal del inquietante himno de los derechos humanos de Peter Gabriel, “Biko”, proporciona la banda sonora con voces recién grabadas del coro de gospel The Spirituals de Londres, y la actriz argentina Mía Maestro proporciona la poderosa narración del poema “Oda a Amnistía”, escrito especialmente por Bill Shipsey para la película y traducido ahora a veinte idiomas.
“Freedom Flight” (Vuelo a la libertad), una película para Amnistía Internacional Francia de dos minutos de duración, producida por Art for Amnesty y Celestial, una empresa de arte con drones de última generación, se rodó frente a la Isla Robben en Ciudad del Cabo, la Ópera de Sidney, la mezquita Jama Masjid de Nueva Delhi, la Plaza del Zócalo de la Ciudad de México y en el Palacio de Chaillot de París.
Peter Gabriel incorporó las voces de “The Spirituals”, que se reunieron durante el último año en el marco de COVID-19, como medio para reivindicar y celebrar los espirituales, compositores y músicos negros. Debido a las restricciones de tiempo y de COVID-19, los cantantes grabaron pistas individuales en sus teléfonos y las enviaron para su montaje la semana pasada.
Gabriel, Embajador de Conciencia de Amnistía Internacional y proponente de la organización de derechos humanos desde hace mucho tiempo, dijo:
“Ha sido una carrera contrarreloj, pero sin duda ha merecido la pena. The Spirituals Choir se ha comprometido a contar historias de justicia social e historia negra a una nueva generación, lo que encaja muy bien con la inspiración de la historia de Steve Biko.”
“Ahora, más que nunca, necesitamos que el mayor número posible de personas empiece a tomarse la injusticia como algo personal y se implique de la forma que pueda. Amnistía ha hecho un trabajo extraordinario en todo el mundo que considero realmente importante y que he apoyado desde hace cuarenta años, por lo que me alegró mucho que me pidieran que colaborara con esta hermosa película.”
La actriz y ambientalista argentina Mía Maestro, quien pone la voz en español, dijo:
“Me sentí muy honrada de que me pidieran dar voz a la versión en español de esta película del 60º aniversario, ya que he estado siguiendo el trabajo de Amnistía desde que era niña. Esto ha sido fundamental para el avance de los derechos humanos en mi país, Argentina, desde lograr el reconocimiento de las miles de desapariciones ocurridas bajo la junta militar, hasta defender los derechos de los pueblos indígenas que han sido desplazados de sus tierras ancestrales.”
“Viviendo en Estados Unidos, también seguí el trabajo de Amnistía sobre los derechos humanos pisoteados por el gobierno estadounidense en el contexto de la ‘Guerra contra el Terrorismo’, y la proliferación de contratistas privados de seguridad militar que se han beneficiado del sufrimiento humano, en violación del derecho nacional e internacional. Siempre pienso en Amnistía como la voz de quienes no tienen voz, que se asegura de que los abusos de derechos humanos no pasen desapercibidos y ofrece una plataforma a las personas afectadas.”
Sylvie Brigot, directora de Amnistía Internacional Francia, ha declarado:
“El 60º aniversario de Amnistía Internacional es un hito enorme para el movimiento mundial y estamos encantados de conmemorar este momento con una película verdaderamente global, innovadora y hermosa. Las estrellas en el cielo de todo el planeta representan a los millones de activistas de todo el mundo que hacen de Amnistía Internacional lo que es hoy. ¿Y qué lugar más apropiado para terminar la película que el Palacio de Chaillot, donde se adoptó la Declaración Universal de los Derechos Humanos por la que todos luchamos?”
Bill Shipsey, fundador de Art for Amnesty, que concibió la idea de la película, dijo:
“Esta película, que combina arte, música, poesía y tecnología, es un agradecimiento y un testimonio de las contribuciones de las y los millones de miembros de Amnistía presentes y pasados, que han trabajado incansablemente por los derechos humanos en los últimos 60 años. Esperamos que la película inspire a una nueva generación de activistas a actuar en favor de los derechos humanos, a hacerse miembros de Amnistía Internacional y a apoyar su importante labor.”
En la película, las y los activistas de Amnistía Internacional “sueltan” drones iluminados en el cielo que se unen a decenas de otros drones iluminados, y que, a su vez, representan a las y los activistas de la organización que actúan en todo el mundo. Estos drones iluminados se transforman en la paloma de Amnistía diseñada por Picasso.
Posteriormente, la paloma gigante sobrevuela majestuosamente los diferentes lugares, antes de transformarse finalmente en una representación artística de la icónica vela de Amnistía Internacional, en alambre de espino, sobre el Palacio de Chaillot en París.
La escena final de la película muestra a los activistas de Amnistía Internacional en Sudáfrica mirando a la cámara, con las palabras “Junto a ti, somos más fuertes” en la pantalla.
Una “Oda a Amnistía” escrita por el fundador de Art for Amnesty, Bill Shipsey, sirve de narración a la película, contando la historia de la trayectoria de Amnistía Internacional desde su creación en 1961. El poema se ha traducido hasta ahora a veinte idiomas, entre ellos el francés, el español, el árabe, el mandarín, el ruso, el portugués, el alemán, el farsi y el bengalí, lo que da a la película un alcance verdaderamente mundial.
El primer verso hace referencia a los seis “prisioneros olvidados” originales que aparecen en un artículo de The Observer escrito por el fundador de Amnistía Internacional, Peter Benenson, el 28 de mayo de 1961. El segundo, a la labor que realizó Amnistía en la década de 1970 para garantizar la prohibición de la tortura. El tercero, a la ampliación del mandato de Amnistía, que pasó de los derechos civiles y políticos a abarcar también los derechos económicos, sociales y culturales en 2001. El cuarto refleja la fuerza actual de Amnistía con sus 10 millones de miembros y simpatizantes. El quinto y último es una llamada a la acción para solicitar nuevos miembros y simpatizantes.
“Freedom Flight” (Vuelo a la libertad) fue apoyado por Bono, The Edge y Peter Gabriel, así como por varias secciones de Amnistía Internacional.
Nick Kowalski, Tony Martin y John Hopkins, fundadores de Celestial, que han creado esta película, están orgullosos de participar en el proyecto. Dijeron:
“Celestial se basa en sólidos valores éticos. Queremos utilizar nuestra innovadora tecnología creativa para el bien y colocar mensajes de esperanza en el cielo. Creemos en la causa de Amnistía y este proyecto nos pareció la oportunidad perfecta para mostrar nuestra innovación e inspirar a la gente a defender los derechos humanos.”