El proyecto multimedia online de Amnistía Internacional Gas lacrimógeno: Investigación ha ganado hoy el prestigioso premio Webby para el mejor sitio web de activismo del mundo.
Calificado de “máximo honor en Internet” por The New York Times, la vigesimoquinta edición de los premios Webby, que otorga la Academia Internacional de Artes y Ciencias Digitales (IADAS), es el principal evento internacional que premia la excelencia en Internet.
“Nos encanta haber alcanzado esta distinción, que refleja el arduo trabajo que han hecho nuestro equipo y nuestras entidades asociadas para garantizar que Gas lacrimógeno: Investigación fuera lo más informativo, pertinente, intuitivo y visualmente impactante posible”, declaró Sam Dubberley, director del Evidence Lab del Programa de Respuesta a las Crisis de Amnistía Internacional.
“Es un gran honor que el sitio sea tenido en tan alta consideración por el jurado de los premios Webby y el público, y esperamos que esta atención sirva para concienciar sobre el tema tan grave del que trata. Cuando las fuerzas policiales abusan de él, el gas lacrimógeno y otras armas menos letales pueden mutilar y matar, en violación del derecho y las normas internacionales de derechos humanos. La transferencia y el uso del gas lacrimógeno debe regularse mejor globalmente”.
Cifra récord de sitios presentados a los premios Webby
A los premios Webby de este año se presentaron 13.500 sitios de 70 países, la cifra más alta alcanzada hasta ahora. Amnistía Internacional ganó el premio Voz del Pueblo para la categoría de activismo.
“Nominados como Amnistía Internacional establecen la pauta de la innovación y la creatividad en Internet”, declaró Claire Graves, directora ejecutiva de los premios Webby.
“Es un logro increíble ser seleccionado entre los mejores de los 13.500 sitios que recibimos este año”.
Las entidades ganadoras fueron anunciadas el martes 18 de mayo y homenajeadas en un espectáculo virtual lleno de estrellas que presentó la actriz, escritora, podcaster y defensora Jameela Jamil.
En nombre de Amnistía Internacional, cinco activistas del movimiento global de derechos humanos residentes, respectivamente, en Beirut, Hong Kong, Lima, Nairobi y Washington D. C., pronunciaron uno de los famosos discursos de cinco palabras de los premios Webby: “Protect people’s right to protest (Protejan el derecho de las personas a protestar)”.
Sitio web creado tras una exhaustiva investigación
El Evidence Lab del Programa de Respuesta a las Crisis de Amnistía Internacional comenzó a investigar el uso indebido de gas lacrimógeno en el mundo en 2019, principalmente mediante el análisis de vídeos subidos a plataformas de redes sociales.
Utilizando métodos de investigación basados en fuentes de acceso público, la organización verificó y señaló eventos en los que se hizo un uso indebido de gas lacrimógeno. El análisis fue realizado por el Digital Verification Corps (Cuerpo de Verificación Digital) de Amnistía Internacional, una red de estudiantes de siete universidades en cuatro continentes con formación en el rastreo y la verificación de contenido de las redes sociales.
El sitio web resultante –que se hizo público en junio de 2020 y fue diseñado en asociación con Xpon Digital– incluye un mapa interactivo en el que hay vídeos de más de 100 incidentes de uso indebido de gas lacrimógeno en 31 países y territorios. También contiene una serie de entrevistas a especialistas y un vídeo, Choking Dissent, producido con SITU Research, en el que se analizan las características funcionales del gas lacrimógeno, se explica el funcionamiento interno de las municiones y se muestra cómo su uso indebido puede mutilar y matar. En febrero de 2021 se añadieron nuevos incidentes al sitio web, que será actualizado periódicamente.
Amnistía Internacional, junto con la Fundación de Investigación Omega, lleva más de dos decenios haciendo campaña en favor de que se controle mejor la producción, el comercio y el uso del gas lacrimógeno y otras armas y material para hacer cumplir la ley. Como resultado, la ONU y organismos regionales como el Consejo de Europa han reconocido la necesidad de regular la exportación de este material.
Gracias a la labor de incidencia diplomática de alto nivel llevada a cabo por los más de 60 Estados que integran la Alianza por un Comercio sin Tortura, que apoyan Amnistía Internacional y la Fundación Omega, la ONU está estudiando la posible elaboración de controles sobre el comercio internacional de armas y material para hacer cumplir la ley, y otros artículos, y así evitar su uso para cometer tortura y otros malos tratos o aplicar la pena de muerte. Amnistía Internacional y la Fundación Omega presionan actualmente para que esas medidas incluyan el gas lacrimógeno y otras sustancias químicas irritantes.