Las autoridades de Bangladesh deben transmitir un enérgico mensaje que indique que los homicidios dirigidos a silenciar las voces discrepantes son despreciables y no se tolerarán. Así lo ha manifestado Amnistía Internacional en respuesta a la noticia de que al bloguero Niloy Neel lo han matado a machetazos en su casa de la capital, Dhaka, hoy.
Conocido por sus opiniones laicas, es el cuarto bloguero que sufre una muerte tan brutal a manos de grupos armados con machetes en lo que va de año.
“Esta oleada de salvajes homicidios debe cesar ya mismo. No cabe apenas duda de que estos homicidios, especialmente brutales, están concebidos para sembrar el terror y para acallar la libertad de expresión. Es inaceptable", ha manifestado David Griffiths, investigador sobre Asia meridional de Amnistía Internacional.
“El precio de tener una opinión y expresarla libremente no debe ser la muerte. Las autoridades bangladeshíes tienen ahora el deber urgente de dejar claro que no se tolerarán más ataques como este.
“Deben llevarse a cabo sin demora investigaciones exhaustivas, efectivas, independientes e imparciales para garantizar que todos los responsables comparecen ante la justicia en juicios justos y sin recurso a la pena de muerte."
Otros tres blogueros –Avijit Roy, Washiqur Rahman y Ananta Bijoy Das– han sido víctimas de homicidios similares en el país desde febrero.